Contribución al Conocimiento Científico y Tecnológico en Oaxaca

La ciencia en México está profundamente enraizada al conocimiento de los pueblos nativos cuyas vidas estaban fuertemente vinculadas al mundo físico y natural. Los mayas tenían un profundo conocimiento de los fenómenos naturales, tales como el ciclo del agua, regeneración vegetal y eventos astronómicos. Este conocimiento no sólo era importante por sus aplicaciones en agricultura, sino también por razones religiosas y políticas. Es necesario recordar que, en el año de 1521, Tenochtitlan, el corazón del imperio azteca, fue conquistado por los españoles. A su llegada, los españoles quedaron impresionados por las colecciones de flora y fauna, y por los jardines que eran propiedad de los Tlatoanis, y que utilizaban para el estudio, preservación y reproducción de algunas especies (Riedlinger et al., 2020). Ese conocimiento, motivó a los españoles a iniciar una serie de expediciones, para registrar y estudiar especímenes de flora y fauna. En 1821, ocurre la independencia de México, y casi inmediatamente inicia la Institucionalización de la ciencia. En 1833 se funda la primera sociedad científica en el continente americano y la cuarta en el mundo, “La Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística” (Azuela Bernal, 2012). Durante el siglo XIX se producen diferentes publicaciones para el público en general, siendo “Mosaico mexicano” (1843-1846) una de las más populares. Esta publicación presentaba descubrimientos científicos, y describía fenómenos naturales, además de presentar poesía, eventos históricos, consejos prácticos para agricultura, biografías de celebridades, etc. (Cuevas, 2002).

El inicio del siglo XX fue marcado profundamente por la revolución mexicana, y en 1920, José Vasconcelos, presidente de la Universidad Nacional de México, inicia una tarea por la educación, la cual incluía un ambicioso programa editorial. Se menciona que en 1960 da inicio la era moderna de la comunicación de la ciencia en México, lo que hoy conocemos como “comunicación pública de la ciencia” (Riedlinger et al., 2020). A partir de entonces, se observan esfuerzos importantes para producir obra editorial e impulsar la escritura y difusión del conocimiento científico.

En CCCTO nos complace seguir contribuyendo modestamente a la comunicación de la ciencia mediante la publicación de artículos de investigación. Así pues, compartimos con ustedes el volumen número 7 de nuestra publicación digital, y lo hacemos en un marco de festejo, pues en el presente año, el CIIDIR Unidad Oaxaca, cumple su 40 aniversario. Quiero reconocer y agradecer el gran esfuerzo realizado por todo el equipo de trabajo. Deseo que, al leer nuestra publicación, el público en general encuentre información interesante e importante, y de esta forma, CCCTO aporte su grano de arena a la difusión de conocimiento científico.

Dr. Sadoth Sandoval Torres
Editor en Jefe

REFERENCIAS

Azuela Bernal, L. (2012). La Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, la organización de la ciencia, la institucionalización de la Geografía y la construcción del país en el siglo XIX. Investigaciones Geográficas, (52). https://doi.org/10.14350/rig.30346

Cuevas, C. (2002). Historia y divulgación de la ciencia en México. En: Dirección General de Divulgación de la Ciencia (ed.), Antología de la divulgación de la ciencia en México (pp. 121-29). México: Universidad Nacional Autónoma de México, México.

Riedlinger, M., Broks, P., Gascoigne, T., Massarani, L., Leach, J., Schiele, B., & Lewenstein, B. V. (2020). Communicating Science. ANU Press. https://doi.org/10.22459/CS.2020